Brayam Martínez
Barista, emprendedor
En la pintoresca localidad de El Refugio, Ahuachapán, el viaje de Brayam Martínez desde una improvisada cafetería hasta una célebre tienda de cafés especiales refleja el poder de la innovación y el espíritu comunitario. Como uno de los propietarios de El Refugio Specialty Coffee Shop, Brayam ha transformado su pasión por el café en un próspero negocio que adopta prácticas sostenibles y valores comunitarios.
Humildes comienzos y grandes sueños
El Refugio Specialty Coffee Shop empezó modestamente en un garaje, amueblado con cajas de madera reciclada y muebles de palé. Al principio, funcionaba como una cafetería típica, utilizando una máquina de cápsulas y una cafetera básica. Sin embargo, Brayam y su familia albergaban el sueño de crear algo más singular: un espacio dedicado al arte del café de especialidad.
La pandemia de COVID-19 supuso un punto de inflexión. Con el mundo ralentizándose, Brayam vio la oportunidad de replantearse y reconstruir. Durante este periodo, recibió el valioso apoyo de Cáritas Santa Ana, que le proporcionó asesoramiento administrativo y una beca para formarse en la Escuela de Café RENACER. Fue una experiencia transformadora que sentó las bases para la evolución de la cafetería hasta convertirse en un centro neurálgico del café de especialidad.
Educación y transformación en RENACER
En RENACER, Brayam se sumergió en el mundo del café de especialidad. Asistió a cursos sobre técnicas de barista, catación de café y gestión de fincas cafeteras, en los que adquirió un profundo conocimiento de los entresijos de la preparación del café y la agricultura sostenible. Allí conoció la iniciativa Blue Harvest, que hace hincapié en las prácticas agrícolas sostenibles para proteger los recursos hídricos y mejorar la calidad del café.
Armados con estos nuevos conocimientos y visión, Brayam y su familia decidieron remodelar su cafetería. Adoptaron un diseño minimalista y rebautizaron su negocio con el nombre de El Refugio Specialty Coffee Shop para reflejar su compromiso de ofrecer café de alta calidad. La tienda, que originalmente se llamaba «Leche Café», era ahora un símbolo de su refinado enfoque y dedicación.
Ampliando horizontes más allá del café
La transformación no terminó con el café. Gracias a la formación en gestión impartida por el Proyecto PROSPERA, Brayam y su equipo ampliaron su oferta culinaria. Esto les permitió diversificar su menú y mejorar la gestión empresarial, convirtiendo la cafetería en una experiencia gastronómica integral.
La colaboración con otras cafeterías locales, a las que Brayam llama cariñosamente «cafeterías hermanas», ha sido decisiva para su crecimiento. Estas asociaciones fomentan el intercambio de conocimientos sobre café y cocina, lo que les permite mejorar continuamente su oferta e introducir nuevos platos.
Una visión de futuro
De cara al futuro, Brayam sueña con cultivar su propio café y abrir nuevas sucursales de El Refugio bajo el mismo modelo sostenible y socialmente responsable. Se imagina un negocio que no sólo produzca un café excepcional, sino que también valore a sus trabajadores y apoye la economía local.
Brayam está profundamente comprometido con los principios de la economía social y el consumo local. El Refugio Specialty Coffee Shop se enorgullece de apoyar a los productores locales y de garantizar salarios justos a sus empleados. Esta ética refleja un compromiso más amplio con la comunidad y la protección del medio ambiente.
Gratitud e impacto en la comunidad
Brayam agradece a RAÍCES EL SALVADOR y a sus socios su apoyo a lo largo de su trayectoria empresarial. Su orientación ha sido crucial para transformar El Refugio en una cafetería única, testimonio del poder de las empresas impulsadas por la comunidad.
Su historia es un recordatorio de que con pasión, conocimiento y el apoyo de la comunidad, es posible crear un negocio que no sólo prospere, sino que también tenga un impacto positivo en su entorno.
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